En ocasiones es probable que la gente considere que no es necesario contar con ciertos perfiles profesionales a la hora de realizar reformas en el hogar u oficina. Pero ¿Y si te dijéramos que a largo plazo es más económico y aporta más valor contar con un arquitecto de interiores?

Su función en todo proyecto aporta muchas ventajas. No sólo desde un punto de vista estructural. El arquitecto de interiores es el encargado de mejorar la función y cualidades del interior, sacándole todo el jugo al espacio (y por tanto aprovechando al máximo su capacidad y funcionalidad), pero también aportando valor y conocimiento desde un punto de vista formal, encuanto a materiales, estética, objetos, colores y superficies.

Un arquitecto de interiores no es un decorador.

Es más que eso. No solo aúna el buen gusto a la hora de dar el toque final a una vivienda, sino que planifica, organiza y gestiona el proyecto desde el principio, y dirige y supervisa todo el proceso de construcción. Esto supone no solo la integración a nivel constructivo de los espacios y el mobiliario, sino que se traduce en un ahorro de tiempo y por tanto costes, sin descuidar la calidad de los materiales y acabados. Una mala ejecución de obra nos hará, a medio y largo plazo, tener que reinvertir dinero en modificar aquello que no se hizo bien en origen.

Es muy normal ver webs de compra venta de vivienda con casas oscuras, envejecidas o con “los muebles de la abuela”. Hoy día, invertir en un profesional cualificado no sólo hará que recuperes los costes de la inversión, recibiendo a cambio mayor ergonomía, comodidad y estética. El valor añadido de contar con un arquitecto de interiores se puede cuantificar en el valor monetario final de una vivienda. Como decía Raymond Lowe: “Lo feo no se vende”. Y es ahí donde nos encontramos con que una vivienda bien reformada y con los muebles adecuados se vende o alquila más rápido y a mayor precio.

En esencia, si quieres ahorrar costes, mejorar tu espacio, la iluminación, distribución o funcionalidad de tu vivienda, debes contar con un profesional cualificado que te aporte la mejor de las soluciones. Sin duda creemos que no te arrepentirás.

DUO Estudio

Cada persona es única. Su cocina, también.